El dueño de una pinturería, un chofer de micro, un técnico en producción agropecuaria, dos bomberos, una policía retirada, concejales en funciones, excandidatos a intendentes, hijos, padres, esposos y esposas de referentes libertarios, parientes de todo tipo, jóvenes de entre 22 y 25 años sin experiencia en materia previsional y, por cierto, numerosos militantes locales explican en gran medida los 119 nombramientos de La Libertad Avanza en las jefaturas de las oficinas de ANSES en prácticamente los 135 municipios de la provincia de Buenos Aires.
Por un lado, discursivamente el Gobierno apela a la idea de la motosierra sobre las oficinas del aparato estatal. Por el otro, eludiendo la posibilidad de nombrar a un empleado de carrera dentro del área que se encarga de la previsión social, el partido fundado por el presidente Javier Milei, bajo la tutela de Karina Milei y su armador bonaerense Sebastián Pareja, eligió convertir a las dependencias de ANSES en un conchabo de militantes para el lapso que va de una elección a la otra.