3 DE JUNIO: A la memoria del General Manuel Belgrano a 251 años de su natalicio
Escribe: Dr. Mario Quiroz, abogado y licenciado en Ciencias Políticas.- Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano nació en Buenos Aires, el 3 de junio del año 1770. Estudiante excepcional, abogado, uno de los más notables economistas argentinos, estadista, precursor del periodismo nacional, impulsor de la educación popular, la industria nacional, la defensa de los derechos humanos y la valorización del rol de la mujer, militar y creador de la Bandera y de la Escarapela Nacionales, entre otras grandes proezas.
En verdad, la figura de Manuel Belgrano es una de las más emblemáticas en el reducido altar de los padres de la patria argentinos. Criollo, hijo de padre italiano y madre argentina, nacida en Buenos Aires, pero de antigua ascendencia santiagueña, Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús, abrazó la Revolución de Mayo con la totalidad de su ser y, aunque formado en leyes y con una carrera muy prolífica como funcionario, no dudó en hacerse cargo de los diversos ejércitos que formó el gobierno patrio en sus luchas emancipadoras.
Es pues en la galería de Celebridades Argentinas no comprenderá sino los retratos y las biografías de los que tienen derecho a la gratitud de sus descendientes, es allí donde se encuentra el Gral. Don Manuel Belgrano.
Un patriota excepcional, ciudadano con firmes convicciones y comprometido con su Patria, uno de los grandes hombres de la Nación Argentina, hoy sólo nos toca el honor de brindarle el merecido homenaje y reconocimiento, sí a nuestra generación que tan sólo ello podemos hacer, encontrando en él un modelo digno de imitarse.
Pondero su bondad y las virtudes personales que brillaban en todos sus actos, la sensatez tranquila de su conducta y su amor desinteresado por la disciplina.
La Patria de Don Manuel Belgrano, la Patria que él amó más que a su propia vida, la que le hizo decir “Mucho me falta para ser un verdadero Padre de la Patria, me contentaría con ser un buen hijo de ella.”, esa Patria le sigue debiendo el verdadero homenaje al hombre y al Prócer, quién siempre permanecerá presente en nuestra historia y en nuestra memoria.