Luego del triunfo de Javier Milei en el balotaje frente a Sergio Massa, Elisa Carrió sentenció el fin de Juntos por el Cambio. Señaló que se rompió la alianza opositora y que la Coalición Cívica recupera su “plena autonomía”. Desde el espacio de la socia fundadora de Cambiemos apuntaron contra Mauricio Macri por su acuerdo con el líder libertario, a espaldas de los referentes de la oposición.
“Lilita” ya había anticipado, tras los comicios de octubre, que desde la CC no iban a acompañar a ninguno de los candidatos que llegaron a la segunda vuelta. “Aceptamos el resultado electoral, pero no votaremos por ninguna de las dos opciones que competirán en el balotaje, las que proponen gobiernos irresponsables basados en imposibilidades morales y políticas y pactos de impunidad. En consecuencia no es ni con Massa, ni con Milei”, definieron la noche del 22 de octubre.
Este domingo 19 de noviembre, Carrió difundió un audio que hizo llegar a los medios de comunicación en el que declaró el fin de JxC y dejó en claro su posicionamiento de cara al futuro inmediato. “Habiéndose roto la alianza Juntos por el Cambio, por voluntad ajena a la Coalición Cívica, Elisa Carrió y la Coalición Cívica retoman su plena autonomía y van a luchar por los principios fundacionales, el contrato moral, el contrato republicano y el contrato de desarrollo económico”, señaló en un discurso expresado en tercera persona.
En este marcó reafirmó que ni ella, ni su partido, “participarán de ningún tipo de negociación”. “Su rol es reconstruir la República si esta se ve amenazada”, concluyó.
Carrió fue de las primeras voces dentro de la coalición que alertó del interés de Macri en acercarse a Milei en perjuicio de JxC. En una entrevista que dio en el mes de abril dijo que desde 2022 “detectó” que el exmandatario “no quiere estar con el radicalismo ni con la Coalición Cívica” y que su objetivo era “estar con Milei”. Incluso alertó que un ajuste en la economía como el que avalan Macri y el líder de La Libertad Avanza sobre “una clase media diezmada” significaría “el fin de la clase media”. Y que ese ajuste solo se puede implementar “con una brutal represión”. Uno de los problemas de “reprimir indiscriminadamente y poner orden” es que puede terminar “siendo funcional” al kirchnerismo y provocar “una guerra civil”, advirtió meses atrás.